Cuando los deportistas tienen que competir bajo climas
difíciles, lo ideal es entrenar en las mismas condiciones climáticas.
Habitualmente somos testigos de cómo nuestros deportistas
entrenan en sus diversas especialidades en campos de deportes o en los
exteriores de climas mediterráneos (por ejemplo), o en recintos cerrados con
aire acondicionado, cuando en realidad el día que tengan que competir, lo harán
en unas condiciones climáticas, a veces extremas.
Y es que, resultaría sumamente arriesgado presentar a unas
olimpiadas a un equipo de deportistas, habituados a entrenar bajo climas
bonancibles, sin una preparación previa de entrenamiento y esfuerzo bajo otras
condiciones climáticas estresantes por su agresividad.
De hecho, la gran preocupación de los entrenadores y
médicos deportivos, astronáuticos, fisiólogos, los científicos especializados
en biomecánica humana y los expertos en seguridad industrial, se centra en la
incógnita que representa el conocer anticipadamente la respuesta fisiológica
individual del organismo cuando está sometido a grandes esfuerzos bajo
condiciones climáticas extremas.
En estos mismos términos se han expresado en los medios de
comunicación deportistas experimentados de la talla de Carlos Sainz, ganador
del Rally Dakar 2010, el cual manifestó: "lo único que me preocupa son las
temperaturas extremas, las deficiencias de oxígeno y la altitud”.
Es por ello que las cámaras climáticas de estrés
biomecánico desarrolladas por CCI representan un valiosísimo instrumento de
investigación al servicio de los científicos, los deportistas y los diseñadores
de material e indumentaria.
En esta cámara climática de estrés se programan las
condiciones climatológicas del escenario en el cual se desarrollan las
respectivas actividades, tales como: frío, calor, humedad, altitud,
contaminación, contenido de oxígeno, radiaciones solares, etc. y bajo dichas
condiciones los deportistas, los trabajadores y los profesionales diversos, son
sometidos a ejercicios físicos repetitivos en las máquinas de esfuerzo
convencionales, mientras el equipo médico monitoriza los parámetros
fisiológicos a través de sensores bluetooth, estudia el comportamiento de los
materiales y la respuesta del equipo técnico.
Así, ha sido posible recrear en el interior de la cámara
climática CCI, la climatología del desierto más árido del mundo, con
temperaturas entre -10ºC y +60ºC, gran altitud, baja concentración de oxígeno y
cambios psicrométricos extremos (desierto de Atacama), lugar donde se ha
desarrollado el Rally Dakar 2010.
Situado al norte de Chile, el desierto de Atacama se
asemeja al paisaje lunar por las formaciones de piedra, sal petrificada, arena,
los Geiser del Tatio (campo geotérmico ubicado en la Cordillera de los Andes),
y el Salar de Atacama, que tiene una superficie que supera los 3.000 km2.
La cámara climática de esfuerzo CCI está siendo noticia en
los telediarios de máxima audiencia de diversas cadenas de televisión y los
medios de comunicación más relevantes del mundo.
CCI desarrolla desde el año 1967, bajo la certificación
AENOR, cámaras bioclimáticas y de simulación ambiental para investigación y
entrenamiento deportivo. A este respecto es de destacar que CCI ha fabricado
este tipo de cámaras de ensayos para las entidades de la máxima relevancia y
los centros de investigación más prestigiosos existentes en la actualidad,
tales como el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Instituto
de Técnica Aeroespacial (INTA), etc., y Centros de Alto Rendimiento Deportivo
del Consejo Superior de Deportes.