Determinados materiales expuestos a la intemperie sufren
daños estructurales superficiales y envejecimiento en general, como
consecuencia de la concentración de ozono existente en la atmósfera. Los
materiales que más se ven afectados por el ozono son las gomas, los cauchos y
los elastómeros de composiciones derivadas de los mismos.
Cuando este tipo de materiales está expuesto a atmósferas
conteniendo ozono, se observa un deterioro superficial evidenciado por pérdida
de color, harinamiento y agrietamiento conocido por el nombre ingles de
craking.
Para ensayar en laboratorio el grado de resistencia de los
elastómeros al ozono, se emplean las cámaras multinorma de ensayos de ozono
combinadas con climas y esfuerzos dinámicos de tracción, flexión, torsión, etc.,
siendo la prueba más común de todas la de alargamiento combinado con ozono,
temperatura y humedad.
En la imagen se presenta una cámara de ozono convencional.
Las cámaras fabricadas por CCI van dotadas de programación
directa de concentración de ozono mediante espectrofotometría ultravioleta y
son autocalibrables de forma automática.
Todas las cámaras CCI van acompañadas de su correspondiente
certificado de calibración de temperatura, humedad y concentración de ozono.
Los portaprobetas de alargamiento graduable y los
mecanismos de ensayos dinámicos, son opcionales.
CCI viene desarrollando desde 1967, bajo la certificación
AENOR, cámaras de ensayos de ozono, entre las que se encuentran las cámaras de
ensayos múltiples capaces de reproducir las condiciones climatológicas más
adversas, combinadas con esfuerzos mecánicos. A este respecto es de destacar
que CCI ha desarrollado este tipo de cámaras para el Consejo Superior de
Investigaciones Científicas (CSIC), fábricas de automóviles, de cables, etc.,
entre otras entidades relevantes y universidades diversas.